El patrimonio cultural es una herencia, material o inmaterial, que pasa de las generaciones pasadas a las presentes y que también deberá pasar a las futuras. Esta definición está presente en gran cantidad de monumentos, construcciones y espacios tanto artificiales como naturales.
Se implementó la protección del bien cultural poco después de la segunda Guerra Mundial, viendo el gran daño que esta había provocado a muchos monumentos históricos, para así poder conservar el mayor número a las generaciones venideras.
El Patrimonio de la Humanidad fue declarado en la Convención de 1972, y se implementó en 1978.
La Unesco protegió los ocho primeros monumentos en todo el mundo, ampliándose la lista pasadas cinco décadas, llegando hasta más de 1.150 lugares en 167 países.
La manera en la que se ha llevado a cabo esta «protección» ha sido mediante legislaciones, que implican tanto proteger, como restaurar y preservar el patrimonio.